ESTEBAN CISNEROS
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1. Me las encontré en la red social, un punto más en la entropía. Más que la pinta, fantástica, me llamó la atención primero el nombre.
2. Se llaman Rachel y Eilidh. Tocan la batería y la guitarra, respectivamente. Ambas cantan. Ambas fueron parte de Goldn Grrrls, con quienes lanzaron un cassette y un 7” hace algunos años. A buscarlo, que lo vale.
3. Sacred Paws es música a colores hecha en entornos grises. Fantástico.
4. Su cuenta de Twitter dice: Banda de larga distancia entre Londres y Glasgow. Nuestros intereses incluyen los trenes baratos y los caballos. Fair enough, I say!
5. En Glasgow, ciudad musical de por sí, tienen impresionados a todos. Y cómo no.
6. Seguir haciendo música nueva, emocionante y elocuente es un reto siempre. Porque un grupo relativamente joven, justamente, es un punto más en la entropía. Algunos van encontrando su público a partir de unir esos puntos y dibujarse un mapa para circular su mensaje. Y algunos simplemente arrasan. Tienen los medios, la suerte, la sapiencia, la música o todo junto. El caso de Sacred Paws parece estar, justo ahora, en medio, pero con todo el potencial de ser un pequeño huracán pop en línea. Porque justo a eso suena su música: a nervio, a pies moviéndose, a herencia musical bien aprovechada.
7. Sigue la tendencia de las bandas que se abstraen en su colección de discos y luego salen al mundo con un montón de referencias y guiños. Y hay casos en los que, a partir de eso, se crea algo mucho más interesante y que, a pesar de todo, suena a nuevo por cuestión de talento, ansias, agallas, descubrimiento –consciente o inconsciente– de un nuevo hilo negro (¿quién dijo que había uno?) o, de nuevo, por todo ello junto.
8. Hay que volver a inventar la pólvora a diario. Sólo así se mantiene la posibilidad de realmente hacer cosas nuevas, música lozana e importante.
9. ¿Les hablé ya de esas pintas maravillosas? Sacred Paws es música a colores hecha en entornos grises. Pero eso sí que ya lo dije…
10. Su primer EP, Six Songs, salió en Rock Action Records, en 2015. La promesa ya sonaba con un mucho de afán y post punk; de la portada al último guitarrazo, un gran augurio.
11. Sacred Paws estrenó disco largo en enero de 2017, Strike A Match. Diez excelentes canciones que son lo mismo antídoto contra el desconsuelo y combustible cardiaco para hacer frente a las contrariedades y las tribulaciones. Color en el gris. El LP salió, de nuevo, en Rock Action Records, y ojalá se quede como un punto en el tiempo que marque que en 2017 no todo mundo se tomaba demasiado en serio y que, aún entonces, la perfecta subversión empezaba con el ritmo.
12. A primera escucha, pensé en lo mucho que seguro que les gustan The Slits a Rachel y Eilidh. Y Pylon. Y Delta 5.
13. A segunda escucha, pensé en lo mucho que seguro que les gusta el Graceland de Paul Simon a Rachel y Eilidh.
14. A tercera escucha decidí concentrarme en disfrutar y mover los jodidos pies en lugar de estar buscando referencias, rizando el rizo. Porque a veces disfrutar la música (y escribir sobre música) debería ser eso: disfrutar la música y escribir sobre música, sin hacer miles de referencias ni jugar al sapiente.
15. Ya perdí la cuenta de las veces que le he dado vueltas a Strike A Match. Eso debe ser bueno. De que es un gran disco, lo es. Y de que hay que seguir a Sacred Paws, no hay duda.
16. Strike A Match puede adquirirse en línea en http://rockaction.co.uk/artists/sacred_paws. Hay que hacerlo.
C/S.