ESTEBAN CISNEROS
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Ἀντέρως es, en la mitología griega, la representación del amor correspondido. Y al mismo tiempo, el implacable vengador de los corazones rotos. No podía haber otro nombre para un grupo que, justamente, se ha impuesto esa misión: hacer llevaderos los ratos, pegar los pedacitos de las almas estropeadas. Damas, bichos y caballeros: Anteros.
Se trata de un grupo londinense muy de nuevo milenio: autogestivo, luminoso y sin ambages al mirar atrás en la historia del pop. De hecho, fue en un concierto de Pretenders que Laura Hayden, voz y cerebro del grupo, decidió que quería ser Chrissie Hynde (o que crearía un monstruo nuevo en el intento; fue, incluso, presentadora en MTV España en Barcelona, donde creció).
Joshua Rumble (bajo) hace diseño gráfico y maneja la van en la que se van de gira, perdiéndose en calles chuecas de ciudades extrañas; Charles Monneraud (guitarra) es músico de sesión y Harry Balazs (batería) era DJ en bodas iraníes.
Sacan su material nuevo en cassette, confían plenamente en las redes sociales, documentan su gira en un blog de Tumblr y ya abrieron en Other Stage de Glastonbury en 2016.
Y, haciendo honor al nombre, suenan justamente a dulce fármaco para las entrañas dolientes. Su saludable dieta de new wave, Blondie y Stevie Nicks, de britpop pancista y de grupos de chicas de los 90, les hace sonar como un Saint Etienne para milénicos, unos Pretenders festivaleros (en el mejor sentido del término).
Sus canciones son introspectivas pero bailonas, mohínas pero efervescentes, hablan de apuros y trances pero son apremiantemente pegadizas. Como a lo que sonaría aquel dios griego antiguo, que iba por ahí volando con su arco y su flecha, buscando vengar a los apesadumbrados.
Han lanzado hasta ahora un sencillo (“Anteros”, en 7” en Regal, del 2015) y dos cassettes en Kissability (“Breakfast”, un single de dos canciones y un EP, titulado igual). Y el futuro se ve prometedor: han girado por todo el país (y aledaños) desde 2015, están haciendo ruido en la radio, saben usar las redes para llegar a su público, han aparecido en The Guardian como grupo promesa y será cuestión de tiempo ver si se deciden a apostarle de tiempo completo a la banda y graban un disco largo. Ahí estaremos.
Por lo pronto, hay que disfrutar de las pocas pero seductoras canciones de Anteros. Porque los tiempos están como para eso: para tener con nosotros música para hacer llevaderos los ratos, para pegar los pedacitos de las almas estropeadas. Para cantar y bailar. Damas, bichos y caballeros: Anteros.
El grupo tiene su sitio oficial en anterosofficial.com
C/S.