NICO GONZALEZ
FOTO: ANTONELA CEBALLOS
Nuevos sonidos desde mi pueblo, esta vez de la mano de Carmen, el nuevo dúo de Pablo Spektro y Daniel Martinotti. Y cuando digo nuevo, digo nuevo en serio, ya que este disco vio la luz apenas ayer.
Primero, es curioso que un proyecto de estas características nazca en una región que padece de un enorme retroceso cultural de más de una década. Zárate se ha caracterizado por “exportar” músicos y bandas de rock que siempre han logrado cierto interés fuera de su territorio, así y todo, la dirigencia política de la ciudad se empeña en desconocer esta situación, llevando adelante el proyecto de ley por el cual se denominó a la ciudad como “Capital provincial del tango”, género que no existe en la ciudad, fácil, hace cuatro décadas.
Volviendo a Carmen, se puede decir que es un proyecto que oscila entre el darkwave y el synthpop, con un sonido clásico de los ochenta aunque con cierto rasgo de new retrofuturism. Entre las obvias referencias se pueden ver aspectos de Depeche Mode, Billy Idol y por supuesto New Order, de quienes ostentan una versión en español de Bizarre Love Triangle.
El trabajo, producido íntegramente por Pablo Spektro, se viene elaborando desde hace bastante tiempo, en parte por esa búsqueda de sonido que le interesaba lograr, y que desde mi opinión está muy bien logrado.
En Carmen conviven vampiros de películas clase b con víctimas desprevenidas, encontrando en casi todas las canciones vuelos teatrales que sería muy bueno que también llevaran a cabo en sus presentaciones en vivo.
Con este proyecto Pablo Spektro pone a prueba su versatilidad, que lo ha llevado de ser en los noventa el frontman de una de las bandas pioneras del ska punk argentino, al hard rock de Spektro’s, para finalmente aterrizar en lo que es su trabajo más pop hasta el momento.